A los chicos de Tokio Hotel les puede tomar mas tiempo estar listos que a ti, pero la fiesta no comienza sin sus himnos llenos de guitarra de todos modos.
Tratar de entrar a lo de Tokio Hotel es un poco como tratar de penetrar en Fort Know. Una vez llegar al centro de Manhattan donde la banda se hospeda, dos publicistas te dan la bienvenida en el lobby y un puñado de personas te acompañaran hasta el piso 18. Ahi, pasaras, por dos guardaespaldas sin sentido del humor a una suite en donde una persona de marketing te hace sentar, y se planta a si mismo en una esquina. Pero cuando los gemelos Bill y Tom Kaulitz, el cantante y guitarrista de la banda glam-emo alemana (respectivamente) entran a este suavemente iluminado terrario de clase, exudan una calma tacita, con sonrisas Zen plasmadas en sus rostros de bebé. “En todo el mundo, los fans nos siguen.” explica Tom con timidez sobre el DEFCON security. “Cuando nuestro sale de un lugar, tenemos, como 20 coches siguiendonos.”
Los rostros tranquilos de los Kaulitz traicionan el frenesí y la maquinaria rifid – que los rodea por todas partes, todos los dias. (Quizás sea significativo que su último álbum, su segundo lanzamiento en USA se titula Humanoid). Luego de nueve años juntos Tokio Hotel ha vendido 3.5 millones de álbumes en todo el mundo, tienen una estrella nombrada en honor a la banda (por un superfan), y Bill ha sido inmortalizado en el museo de cera Madame Tussauds. Sin embargo, la banda estaba segura de haberlo conseguido solo luego de romper en America. Dice Tom, “Creo que un momento clave en nuestra carrera fue el tour en USA y los VMA’s [en el 2008].” (Viajaran a los Estados Unidos de nuevo esta primavera.)
Esa popularidad no ha palidecido. Apenas un dia antes, el grupo, incluido el baterista Gustav Schäfer y el bajista Georg Listing – aparecieron en la MTV en el programa ‘It´s on With Alexa Chung’ para presentar el brillante, y angustioso single “Automatic”, que tambien proporciono una probada de su nuevo amor a los sintetizadores y efectos vocales. Según algunos informes, sus fans estuvieron gritando tan fueerte que los productores de MTV estaban preocupados de que los espectadores en sus casas no fueran capaces de oir la música en sí.
Técnicamente eso no podria ser importante. Para todos los himnos, guiados por la guitarra que ofrece su catalogo (ver “Ready Set Go” del 2007 o “World Behind My Wall” de este álbum), Tokio Hotel son tambien un espectaculo impenitente. Con laca, dentro de una pulgada de su vida, el Mohawk de Bill desafia todas las nociones de fisica newtoniana. Que hace pareja con su maquillaje impecable y una envidiable estructura osea. “Me peino y me maquillo yo mismo”, dice el lider, asintiendo con la cabeza cuando se sienta con la postura impecable. “Yo tomo la inspiración de cosas diferentes. Me gusta David Bowie, y me gustan las peliculas de vampiros” (Tom lanza miradas a su hermano.)
Suavemente desordenado – con trenzas que recientemente reemplazan a sus rastas – el se considera mas como un chico de hip-hop: “He tenido quizas tres cortes de pelo en mi vida, asi que no soy como Billy, cambiando cada dia.”
De alto mantenimiento o no, los hermanos que se criaron en un pueblo alemán llamado Magdeburg – siempre sobresalian como pulgares doloridos. Ellos intercambian miradas de complice.“Fueron tiempos dificiles”, dicen al unisono. Incluso los maestros rechazaban sus inclinaciones a la laca y la sombra de ojos. “Pero,” señala Bill, “nos teniamos el uno al otro".
Los padres de los gemelos apoyaron su interes en la música dejandolos tocan en clubes.
A los 11 años, bajo el nombre de Devilish, los hermanos junto con Schäfer y Listing, dicen que estaban grabando canciones en un estudio. “Les pagamos con cigarrillos y cervezas”, afirma Tom. No les costo nada, que dos años mas tarde, el productor Peter Hoffman los tomo bajo sus alas, animandolos a un cambio de nombre, consiguieron ayuda para escribir canciones, y les consiguio un contrato discográfico. En el 2007, Tokio Hotel tocó para una multitud de medio millón en un concierto cerca de la Torre Eiffel. “Estabamos sorprendidos,” admite Bill. “Fue un gran momento.” Desde entonces, sus vidas han sido una nube de agentes, y viajes de publicidad y fans sin aliento.
Recientemente, los hermanos cumplieron 19. Ellos se podrian haber ido a cualquier parte del mundo para conmemorar la ocasión pero sin embargo volvieron a Alemania, para celebrarlo en un parque de atracciones. “Fue una especie de sueño de infancia lo de tener un parque solo para nosotros,” dice Bill. Asi que no son tan cool para la montaña rusa? “Me encanta! Me encanta!” Incluso si se le estropea su pelo”.